El vigente campeón del mundo de Fórmula Uno, el finlandés Kimi Räikkönen (Ferrari), está muy satisfecho con las últimas mejoras introducidas en su monoplaza, unos cambios que le permitieron dominar de principio a fin el Gran Premio de España celebrado el pasado fin de semana.

En la columna que publica habitualmente en su página web, Räikkönen aseguró que la victoria en Barcelona "fue probablemente la mejor" de su carrera, porque no tuvieron "ni el menor problema durante todo el fin de semana".

"Obviamente, la perfección no se alcanza nunca, pero el resultado general que logramos en Barcelona se acerca bastante", declaró. El piloto finlandés se mostró especialmente satisfecho con las mejoras introducidas tras el Gran Premio de Bahrain y con el reglaje de su F2008 en Montmeló, que le permitieron lograr su primera "pole" de la temporada.

"Todo lo que hicieron los chicos en la fábrica de Maranello para aumentar la velocidad ha funcionado muy bien", señaló. Las jornadas de clasificación suelen ser la asignatura pendiente del piloto de Ferrari. En la última temporada, Räikkönen sólo consiguió arrancar en primer posición en tres grandes premios, mientras que su compañero Felipe Massa logró seis "poles".

"Ahora el coche también funciona en las vueltas de clasificación exactamente como yo quiero", afirmó. El doblete conseguido por Ferrari en Barcelona permitió a Räikkönen aumentar a nueve puntos su ventaja sobre su principal rival, el británico Lewis Hamilton (McLaren-Mercedes), y a la escudería italiana pasar a liderar la clasificación por equipos.

A pesar de su optimismo, el finlandés es consciente de que aún quedan muchas carreras por disputar y de que no siempre le saldrán las cosas tan bien como en Barcelona. "Tengo una ventaja que me da cierta seguridad en la lucha por el campeonato, pero sólo hace falta un mal resultado para que se esfume. Por lo menos, nosotros podemos permitirnos un mal resultado, pero los demás no", declaró.