A pesar de que en algún momento de la temporada no lo ha sido (como en el adelantamiento que le hizo Hamilton en el GP de Italia), en esta última carrera vamos a tener la oportunidad de ver al mejor Raikkonen, al más agresivo del Mundial, ese piloto que era un auténtico paradigma del maximum attack. Mi compatriota está convencido de que, con la ayuda de Felipe Massa, va a ganar la carrera. En la salida Kimi arriesgará hasta el límite. Ahí Hamilton tiene un problema, porque si cierra bien a Kimi le pasará Alonso y si se dedica a impedir el adelantamiento del español se verá detrás del Ferrari.

Respecto a la polémica con Hamilton, Kimi piensa que el británico podía haber hecho algo más por no estorbarle. Lewis le hizo variar la trayectoria e impidió a Raikkonen seguir en la trazada buena durante las siguientes curvas. Pero eso ya es pasado para él, sabía que no iban a sancionar al inglés y se dedica ya a pensar en la carrera. Estoy impaciente por ver la lucha entre cuatro que habrá hoy en el circuito de Interlagos. Todo puede pasar con Alonso peleando por repetir título, Hamilton en busca de un debut glorioso, Massa con ansias de ganar y Kimi, que volverá a ser él y no cederá un sólo metro.