El español Fernando Alonso (Renault), líder del Mundial de Fórmula Uno con diez puntos de ventaja sobre el alemán Michael Schumacher (Ferrari), rodó en la primera jornada de pruebas libres para el Gran Premio de Turquía, decimocuarta cita puntuable, cerca de un segundo más lento que su rival por el título.

Alonso, actual campeón mundial, se limitó por la mañana a completar una la vuelta para comprobar el correcto funcionamiento de todos los sistemas de su R26, por lo que no pudo evaluarse la situación del bólido del español, pero por la tarde quedó patente, pese a tratarse de una jornada que no suele arrojar resultados contundentes, que la distancia respecto al Ferrari del séptuple campeón mundial es muy grande.

En la sesión vespertina, Alonso marcó un tiempo de 1:28.741, muy alejado del 1:28.777 que Michael Schumacher había sellado por la mañana y del 1:28.819 que éste rubricó por la tarde.

Es difícil saber en cuánta medida afecta a Alonso la imposibilidad de utilizar el prohibido sistema de compensación de masas, del que ya careció en las dos últimas citas (Alemania y Hungría). El déficit de milésimas, de momento, es apreciable y preocupante para el campeón del mundo.

Alonso incluso protagonizó un pequeño incidente en la parte final de la segunda tanda libre con el holandés Robert Doornbos, piloto de pruebas del equipo Red Bull Racing con el que se rozó al tratar de rebasarlo en un postrero intento por mejorar su situación en la tabla de tiempos. Al final el español sólo pudo ser duodécimo, superado incluso por el probador suizo de Midland-Toyota, Giorgio Mondini.

A su compañero de equipo, el italiano Giancarlo Fisichella, le fueron incluso peor la cosas, ya que terminó en el decimoctavo puesto, a casi dos segundos y medio del alemán Sebastian Vettel, que hoy debutó a lo grande como piloto de Fórmula Uno en calidad de probador del equipo BMW-Sauber.

En su primera experiencia en un gran premio, Vettel, de 19 años, fue el mejor en la segunda tanda libre y también en el cómputo general de ambas sesiones. Por la mañana fue octavo y terminó multado con 1.000 dólares por exceso de velocidad en la calle de garajes, pero por la tarde aprovechó su única jornada al volante para volar sobre el asfalto del ''Istanbul Park''.

El piloto germano, procedente de las Fórmula 3 Euroseries, sustituye en las funciones de piloto de pruebas al polaco Robert Kubica, que ha pasado a ser piloto titular de BMW-Sauber en el lugar del canadiense Jacques Villeneuve, campeón mundial en 1997.

El también español Pedro de la Rosa (McLaren-Mercedes) se clasificó sexto por la mañana y noveno por la tarde. En la segunda sesión, el barcelonés, que en Hungría logró la segunda plaza, clasificó noveno, lideró durante mucho tiempo la tabla de tiempos, pero al final fue rebasado por ocho pilotos.

Su compañero del equipo, el finlandés Kimi Raikkonen, fue el mejor en la sesión matinal para celebrar el gran premio número 200 de McLaren-Mercedes y para romper la racha de los terceros pilotos, que habitualmente mandan irremisiblemente en las dos sesiones de los viernes. Por la tarde, el actual subcampeón mundial fue octavo, justo por delante de Pedro de la Rosa, sólo por setenta milésimas de segundo.

Mañana se disputará la tercera y última tanda libre, que dará paso a la sesión de clasificación, con la que se establecerá el orden de salida de la decimocuarta carrera del Campeonato del Mundo de Fórmula Uno.