Gresini: "Mi equipo no estará en el GP de Valencia"

El equipo en el que corría Marco Simoncelli, el San Carlo Gresini, no estará en el próximo GP de la Comunidad, que se disputa en Cheste del 4 al 6 de noviembre. Así lo ha confirmado el dueño del equipo, Fausto Gresini, que está "roto de dolor" tras el fallecimiento ayer en Sepang del piloto italiano de 24 años.

"Mi equipo no participará en el próximo Gran Premio de Valencia, ni en las pruebas prevista para los siguientes días después de la prueba", ha confirmado Gresini en una entrevista de GPone, en la que el director italiano expresa el dolor de todo el equipo: "Al día siguiente, se sufre aún más. Todo sucedió muy rápido, sé que nuestra profesión es muy peligrosa y que el riesgo es parte de este juego, pero siempre tienes la esperanza de que no pase nada. Cuando esto sucede, todo cambia, es difícil de aceptar y de explicar", dice.

Gresini considera que no hay culpables de la muerte de Simoncelli y cree que fue un cúmulo de desgracias: "Fue un accidente causado por una serie de circunstancias negativas increíble, la moto se fue al interior de la curva en lugar de la parte exterior, para ser invertidos en la pista más ancha del campeonato. Es muy mala suerte".

En el ámbito personal, Gresini dice que siempre tuvo una gran relación con Marco y que han pasado dos años maravillosos trabajando juntos: "Tengo en mi cabeza muchas imágenes de estos dos años juntos. Marco siempre era espontáneo, siempre hizo lo que pensó, con un corazón de oro. Sólo recuerdo verle enfadado una sola vez, fue justo con él mismo y con los demás. Amaba el desafío, correr, y a su equipo".

El propietario del San Carlo Gresini no se ha separado en las últimas horas del padre de Simoncelli, que siempre acompañaba a su hijo con el equipo a todos los GP: "Paolo y Marco tenían una complicidad especial, similar a la que suele haber entre dos hermanos, compartiendo cada momento de sus vidas. Marco era un niño especial que provenía de una familia especial", comentó.

La tragedia de Simoncelli no es la primera que vive Gresini al mando de un equipo. En 2003, sufrió también la pérdida de Daijiro Kato, que falleció tras sufrir un accidente en el circuito de Suzuka: "Aquella vez encontramos fuerzas para continuar. Cuando Gibernau ganó en Sudáfrica, había una extraña magia, como si Kato hubiera pilotado con Sete. Ahora no me planteo el futuro, pero lo cierto es que no correremos el próximo Gran Premio en Valencia", concluyó.