Rosberg acarició el podio con el Mercedes

La ecuación sólo puede terminar en éxito: dinero, una marca legendaria, un siete veces campeón del mundo, uno de los jóvenes con más talento y liderando el proyecto un ingeniero que cambió la Fórmula 1. Mercedes, Schumacher, Rosberg y Brawn demostraron en Shanghai que habrá que contar con Mercedes en este campeonato.

El joven hijo de Keke llegó a liderar la carrera durante varias vueltas gracias a una arriesgada estrategia de dos paradas, que a ellos sí les dio un buen resultado, ya que tenía un ritmo muy rápido y desgastaban poco los neumáticos. Nico finalmente terminó quinto a causa de un error en el cálculo de combustible que le impedía ir más veloz y fue adelantando por Hamilton, Button y Webber. Pero Mercedes ha dado un paso adelante importante y, en estos momentos, su coche es el tercero de la parrilla, sólo por detrás de Red Bull y McLaren, pero por delante del lento Ferrari.

Rosberg estaba decepcionado por ese fallo en el consumo de combustible: "Fue realmente horrible, porque tenía opciones de subir al podio, pero pronto estaremos dónde el coche se merece". Michael estuvo mejor que otras veces y fue octavo.