Hispania agota uno de sus cuatro comodines

Apenas faltaban cuatro minutos para el final de la segunda sesión de entrenamientos libres cuando la sala de prensa estalló en un aplauso digno del mejor adelantamiento de Lewis Hamilton o la batalla más cerrada entre Fernando Alonso y Sebastian Vettel el año pasado. Pero no, nada de eso, la razón de la ovación de la Prensa internacional (de algunos de sus representantes completamente irónica, de otros sincera) era que, finalmente, el Hispania salía a la pista.

Y lo hacía Vitantonio Liuzzi, que estaba muy agradecido al trabajo de sus mecánicos e ingenieros, para completar una sola vuelta antes de regresar a boxes mientras Colin Kolles miraba apesadumbrado cómo el coche llegaba al garaje donde, unos minutos antes, los mecánicos trabajaban duro para intentar lograr lo que para ellos supone una hazaña: poner el nuevo monoplaza en pista, aunque fuera para una única vuelta de instalación.

Y es que en Hispania han tenido tantos problemas y difiere tanto lo que es su proyecto a día de hoy de lo que esperaban, que José Ramón Carabante y su hijo salían ayer del circuito casi con la satisfacción del deber sino cumplido, al menos iniciado.

El sueño de esta escudería era estar en la primera carrera del año con Pedro de la Rosa como piloto, un potente patrocinador español y el coche heredado de Toyota. Sin embargo, no hay nada de eso y los mecánicos tuvieron que trabajar durante toda la noche para poder tener el monoplaza a punto para dar esa vuelta, sin paso por la línea de meta, porque tal como salió de boxes volvió a entrar.

La FIA lo hizo saber en un comunicado: "La pasada noche, el personal de Hispania relacionado con el funcionamiento del coche ha estado dentro del circuito durante el período de seis horas que comenzó a las 02:30h del 25 de marzo, diez horas antes de la hora programada para la primera sesión de entrenamientos libres. Ésta es la primera de las cuatro excepciones individuales permitidas a Hispania durante la temporada 2011 del Mundial de F-1, por lo tanto no se tomará ninguna acción". Es decir, que Hispania se ha quedado sin el primero de los cuatro comodines, sin el primer toque de queda para mecánicos e ingenieros que permite trabajar de noche a esos empleados de los equipos como ocurría otras temporadas.

¿Por qué se ha llegado a esta situación? El coche se ha fabricado a trompicones entre Alemania e Inglaterra, con un nuevo diseño exterior, pero con la base del pasado año, sin apoyos económicos extras, nada más que los que traen los patrocinadores que aportan los dos pilotos y el patrimonio de Carabante, y con un jefe de equipo como Colin Kolles que siempre se ha caracterizado en sus anteriores etapas por prometer más que por hacer. Muchas piezas no han llegado a tiempo y lo que se esperaba de Williams no es tanto como parecía.