"Si Schumacher no gana, no será por culpa suya"

Lo ha afirmado Bernie Ecclestone, con una permanente sonrisa en su cuenta corriente desde que supo de su regreso; casi lo ha gritado Luca Cordero de Montezemolo; lo decía hace unos días en este diario Carlos Sainz; y ahora lo razona Ross Brawn: Michael Schumacher estará delante, incluso ganará carreras.

El jefe del equipo que lleva su nombre, presente en los siete títulos del alemán, tanto en Bennetton como en Ferrari, explica su confianza en el Kaiser: "Estoy seguro de que irá bien, aún recuerdo la gran carrera que hizo en Brasil 2006, el día de su retirada. Es cierto y evidente que aún debe coger confianza con el monoplaza, pero estoy seguro de que si no gana una de las carreras que faltan hasta el final de la temporada no será por culpa suya sino porque el Ferrari no es competitivo. Michael se ha mantenido en forma en estos años y ha corrido en karts y motos".

¿Problemas? El ingeniero atómico británico ve pocos: "La F-1 no ha cambiado tanto, la mayor novedad con la que tendrá que enfrentarse es con los neumáticos lisos, pero esto no será un inconveniente para él porque el comportamiento de este tipo de ruedas es predecible. Y es cierto que no conoce la pista de Valencia, pero puede probar en el simulador".

Eso sí, cuando se le pregunta en 'La Gazzetta dello Sport' si apostaría diez euros al título de Button o a una victoria este año de Schumacher, demuestra por qué se le considera una de las personas más inteligentes de la F-1: "Dividiría el dinero, las dos cosas se pueden hacer realidad".

Y se muestra a favor de los test para los nuevos pilotos: "Creo que se debe ser comprensivo en este aspecto. Alguersuari hizo un gran trabajo en Hungría, pero no podemos esperar que en otros casos sea así".