Estas leyendo

Alonso sufre una otitis y tiene 38,5º de fiebre

Fórmula 1 | GP de Malaisia

Alonso sufre una otitis y tiene 38,5º de fiebre

Alonso sufre una otitis y tiene 38,5º de fiebre

El asturiano anuló todos sus compromisos en el circuito excepto la reunión con los ingenieros por sus molestias, y se enfrenta hoy a sus entrenamientos más duros.

Desencajado, Fernando Alonso acudió ayer al circuito de Sepang sólo para ver a sus ingenieros, recibir la visita del médico de Toyota, el doctor Cecarelli y volverse a su hotel con la prescripción de descanso absoluto y antibióticos. Sufre una infección de oídos (Otitis) desde el lunes por la noche en Australia, agravada por las ocho horas de avión desde Melbourne, el húmedo clima malayo y los terribles contrastes de temperatura provocados por sus gélidos aires acondicionados.

Según el doctor Cecarelli, Fernando no es duda para la carrera y puede estar bien incluso en la calificación, pero hoy vivirá una de sus jornadas más duras de entrenamientos. Por la tarde le había bajado algo la fiebre y tenía 38,5 grados, pero un F-1 no es precisamente el mejor sitio para curarse de una afección así, con unos tapones en los oídos, sesenta grados de temperatura en el monoplaza, y tres horas de pruebas por delante. El asturiano tiene mucha fe puesta en este segundo gran premio del año y espera poder estar a tope el domingo.

En su encuentro con los ingenieros, el asturiano supo que van a llevar seguro de nuevo el KERS, en una pista mucho más ancha que la de Melbourne. Igual que Ferrari o McLaren. Esta es la reválida del sistema, aunque el verdadero quebradero de cabeza en Albert Park fue el comportamiento errático de los neumáticos ideados por la FIA, que ya no son consecutivos en su gama, sino alternos. Por lo menos, en Sepang ya no habrá superblandos, sino blandos. Y el problema pueden ser los duros y la facilidad de cada coche para calentarlos.

En el pliego de cambios para el trazado malayo, Fernando planea poner menos ala que en Australia, ya que el exceso de carga aerodinámica le frenó en las rectas hasta quedarse a siete km/h de McLaren e impedirle adelantar con facilidad.

También te puede interesar