La mala suerte sigue persiguiendo a Dani Sordo. Si en Montecarlo se le rompía el turbo y en Suecia partía con cinco minutos de penalización por cambiar el motor, en México ayer no llegó ni a completar el primer tramo. El trapecio de la suspensión delantera izquierda de su coche se rompía en el kilómetro 15 y dejaba de nuevo tirado al cántabro, que abandonaba. "Parece que es un defecto de fabricación", explicaba el copiloto Marc Martí a AS, "porque al coche de Rautenbach le ha pasado lo mismo. Por eso en el equipo han decidido reforzar los de Sebastien Loeb para que no le ocurra a él. Una pena, porque íbamos ganando el tramo y teníamos grandes ilusiones de hacer un buen resultado aquí". Los españoles se reengancharán hoy, pero con 35 minutos de penalización.

Mientras, en cabeza vuelve a estar el sorprendente Jari Matti Latvala, el hombre que ganó en Suecia batiendo el récord de precocidad del campeonato con 22 añitos. Aunque Loeb está corriendo al máximo, se ve incapaz de superarle.