Kimi Raikkonen es un tipo feliz. Siempre lo ha sido, así que ahora supera todas las expectativas como campeón de F-1. Está disfrutando a lo grande y él mismo lo reconoció ayer a través de la página web de Ferrari, su escudería: "Llevo varios días de celebración y fiesta, creo que no he dejado de reírme en todo este tiempo. Estoy especialmente contento por toda la gente que se siente feliz con mi triunfo, creo que todos los italianos lo han celebrado conmigo".

Y en los planes de Iceman está seguir disfrutando de ese momento tan dulce: "He pasado el fin de semana en Mugello y desde allí he volado a Helsinki para seguir celebrando el título con mis amigos y mi mujer, Jenni. Y ahora empiezo mis vacaciones, en las que espero relajarme al máximo y recargar las pilas, ha llegado el momento de pensar en otras cosas que no tengan un volante y cuatro ruedas. No estaré en los test de noviembre y veremos si es necesario que vaya a los de diciembre...". Y termina pensando en el próximo campeonato: "Será bonito comenzar mi segundo año en Ferrari ya como campeón. Supondrá un nuevo reto, incluso más excitante ahora que me he vuelto a enamorar de la Fórmula 1".