La presencia en cuatro ocasiones del coche de seguridad en la carrera de Montreal tuvo una influencia determinante en los resultados, sobre todo para los pilotos que se vieron penalizados e incluso descalificados por sus entradas a boxes.

La experiencia del nuevo sistema de safety car no ha gustado a nadie, pero ha sido Ron Dennis, el patrón de McLaren, quien se ha mostrado más crítico con la norma: "Estoy profundamente frustrado con el impacto del coche de seguridad en nuestra carrera. Es algo que la Asociación de Pilotos debe discutir, porque está fuera del control de los equipos".

El jefe de Fernando Alonso (uno de los damnificados al tener que entrar a repostar y resultar penalizado) tiene claro que es necesario buscar soluciones: "Es una de esas normas que se cambian con buena intención, pero en la práctica se ha visto que ha tenido mucha repercusión en esta carrera y seguramente lo tendrá en otras. Espero que la FIA y todas las escuderías aprendamos la lección de Canadá y se introduzcan las modificaciones necesarias en el reglamento para que los pilotos no se vuelvan a ver penalizados en el futuro, porque creo que nadie va a sacar beneficio de esta situación".

Ferrari cuestiona la exclusión de Massa

Jean Todt, el director general de la escudería Ferrari, habló ayer sobre la exclusión de su piloto Felipe Massa del GP de Canadá tras saltarse un semáforo rojo a la salida de boxes. En principio se mostró respetuoso con la decisión de la dirección de carrera: "No podemos decir nada al respecto. Si un piloto se encuentra un semáforo rojo debe pararse, así son las normas y el reglamento dice que cuando no se cumple debe ser descalificado".

Pero el francés deja entrever que la medida le parece demasiado severa: "En cualquier caso, se deben analizar otros aspectos. Felipe no prestó atención, estaba concentrado en su salida del 'pit lane' y no venía ningún otro coche. Además, nosotros tampoco le avisamos".