Felicidades. ¿En qué ha consistido su celebración?

No era nada especial, creo que son momentos en los que no eres del todo dueño de ti mismo. Tengo que verla por televisión porque no se cómo ha salido ni sé muy bien qué hice. Todo fue por la alegría que llevaba por dentro y de la justicia que esperaba que se hiciese. Es algo merecido tras lo que había pasado en las últimas carreras. Y lo que he hecho según me bajaba del coche era el Ave Fénix.

No esperaba la victoria...

Por la mañana no las tenía todas conmigo, mejor dicho, no tenía ninguna conmigo. En la primera curva intenté arriesgar con Trulli porque era la única oportunidad de adelantar, cogí la parte interior con mucho riesgo pero todo salió bien. Cuando adelanté a Ralf, pensé que la tercera posición era el sueño cumplido. Y más después de adelantar a Massa en el pit stop. Ganar fue algo totalmente inesperado y sobre todo ver a Michael fuera, algo que ves una vez cada dos o tres años. Fue una inyección de alegría increíble.

Parte de la culpa puede ser suya al ir siempre al límite

Desde la vuelta 15 que hice mi parada hasta que él rompió, estábamos más o menos a seis segundos y el coche iba muy bien, por lo que pensé que podía tener una pequeña oportunidad a final de carrera si todo seguía normal, pero luego todo fue bastante fácil cuando rompió porque Massa no estaba yendo muy rápido. No creo que Michael haya roto por mi presión. Podría decir que sí, pero siendo sincero no lo creo porque el motor cuando se tiene que romper se rompe y bajar 500 revoluciones no hace que un propulsor dure 30 vueltas más. Aunque yo he intentado que forzase en todo momento y ponerle en aprietos.

¿Qué sintió al ver su rotura?

Cuando se ha parado delante de mí, al principio pensé que era uno de los Spyker, porque vi una mancha naranja o roja y no pensé que fuera un Ferrari. Luego me concentré en no pisar donde había aceite para no salirme y no me di cuenta de que era Michael hasta que estaba justo a su lado. Lo único que hice fue cerrar el puño y decir "ahora sí" y hablar con el equipo por la radio para decirles "vamos a por la victoria".

¿Empezó a pensar en el título en las últimas vueltas?

Nunca pensé en el título. Pensaba sólo en que Massa no me cogiese. La curva siguiente bajé revoluciones porque ya cualquier resultado nos valía, aunque fuese segundo, porque era buenísimo igualmente. Me he sentido muy feliz al terminar, sobre todo por los mecánicos que estaban muy cabizbajos tras lo sucedido en China. Ha sido una inyección de moral muy fuerte.

'Schumi' ha dado por perdido el título, ¿qué le parece?

Es normal que lo dé por perdido después de haber abandonado y perdido diez puntos. El primer momento es de decepción total, pero dentro de él, y según se vaya acercando Brasil, Ferrari tendrá la esperanza de que yo no acabe. Y de que Michael gane. Y nosotros tendremos el miedo de no acabar.

¿Se ha hecho justicia después de las últimas carreras?

Aquí la justicia va y viene dependiendo de dónde sople el viento. Aunque en algunas carreras, sobre todo en Hungría y Monza, con los abandonos cuando íbamos en puestos de podio, desapareció la ventaja más deprisa de lo normal y ahora se ha ampliado otra vez a valores normales.

¿Ha reaccionado bien su escudería?

El equipo hace siempre lo que puede e intentamos estar arriba. A veces las cosas salen bien y otras mal. Cuando se hacen bien, todo sale perfecto, pero cuando yo me salgo y toco el muro en Canadá, por ejemplo, es un error de pilotaje y tengo que cargar con ello. Y cuando a veces el equipo hace cosas mal, tampoco pasa nada por decirlo.

¿Qué sensación tiene?

De bienestar absoluto. Después de que el Mundial estuviera tan apretado en estas dos o tres últimas carreras, tener este colchón es muy bueno para Brasil, porque sólo necesitamos acabar entre los ocho primeros si Michael gana la carrera y eso facilita las cosas. Los fines de semana fáciles no existen. En China parecía un fin de semana fácil para nosotros y perdimos la carrera y aquí parecía fácil para Ferrari y la han perdido. En Brasil podemos caer en ese error, ya que sólo necesitamos un punto, y no acabar la carrera mandaría todo al traste. Ha sido un paso de gigante muy importante, aunque el Mundial aún no está ganado. Tengo que centrarme al máximo y evitar como sea el abandono. Y el equipo será lo más conservador posible en cuanto a mecánica porque no necesitamos ganar la carrera.

¿Prefiere una victoria así o ganar cazando a Michael?

Prefiero que se haya resuelto así. Estoy seguro de que a ellos no les caían lágrimas cuando en Hungría o Monza me vieron allí tirado. Esta vez la moneda ha caído de nuestro lado y compensa el abandono de 2003.

¿Espera alguna treta de Massa o Ferrari para Brasil?

No. Creo que va a ser una carrera limpia. Hay dos campeonatos en juego y los Ferrari van a intentar hacer doblete.