"Ser líder es un sueño y sólo espero acabar así"

Enhorabuena Fernando, su dominio nos ha vuelto a emocionar a todos.

Gracias, muchas gracias. Ha sido una carrera interesante desde el punto de vista del motor, el coche y los neumáticos. He tenido que ser inteligente y rápido sin maltratar las ruedas. Me llena de orgullo esta victoria, porque le he demostrado a todos los que decían en pretemporada que era un piloto demasiado agresivo para el nuevo reglamento, que también puedo ganar donde más se castigan el motor y las gomas. Y en uno de los mejores sitios para triunfar desde el punto de vista de un piloto, porque Sepang es, junto con Spa, el trazado más técnico. Estoy más feliz de hacerlo aquí en Malaisia que en cualquier otro sitio del mundo.

Y todo eso, sin beber una gota de agua durante la carrera. Llegó a la meta casi deshidratado...

Siempre es duro correr en Sepang, pero esta vez fue peor, porque se averió el sistema que llevamos para que pueda beber y no pude tomar líquido en toda la carrera. Parece que en los circuitos en donde necesitas beber agua el aparato no funciona... Pero veía tan cerca la victoria que me olvidaba de todo lo que pudiera suceder. Eso sí, terminé en el límite de mi condición física.

¿En vez de 56, le pareció que hacía 112 vueltas?

(Se ríe). Parecían muchas. Las últimas quince o veinte vueltas no por la fatiga física, sino por el miedo a una rotura de motor. Crucé los dedos para que todo fuera bien.

Lo que sí tuvo fueron ciertos problemas con los neumáticos...

Esperábamos tener algunos problemas con las ruedas, pero no tantos como en las primeras vueltas, en las que el coche se iba mucho de atrás. Sobre todo en frenadas el coche era muy inestable y existía el riesgo de hacer un trompo. Entonces bajamos un poco el ala de delante (la carga aerodinámica), quitamos un poco de presión a las ruedas de atrás y las cosas comenzaron a ir un poco mejor después de la primera parada. Era un poco más fácil de llevar. A pesar de todo, es cierto que los demás no pudieron seguirme, tampoco iban muy sobrados, porque no nos cogían. Pero hay que mejorar el coche lo antes posible para mantenerlo entre los mejores, porque ha ido peor que en Australia. Allí yo tiré cada vuelta de la carrera sin ningún tipo de problema, muy rápido, muy constante, y aquí no he podido tirar todo el tiempo como hubiera querido, aparte de que he conservado el coche un poquito.

¿Qué fue lo primero que se le pasó por la cabeza al cruzar la línea de meta?

Fue una sensación fantástica de verdad. En Hungría había ganado y fue como un sueño hecho realidad, pero casi no me di cuenta de nada. Lo de hoy sido una victoria trabajada, una carrera inteligente. Conservando ruedas y motor, y con diez puntos que saben a gloria.

Ahora mismo se ha colocado como líder del campeonato...

Es la primera vez que soy líder del Mundial y no tiene demasiada importancia porque quedan 17 carreras, pero bueno, el hecho de ser líder es un sueño. Fantástico. Algo impensable para un piloto joven, de 23 años de edad. He hecho dos carreras muy buenas, sin ningún error, una desde atrás, al ataque en Australia, y otra, aquí en Malaisia saliendo desde el primer puesto y conservando. En las dos he sabido llevar el peso de la carrera. Ha empezado bien el campeonato y ahora sólo necesito terminar en esta posición. No sé dónde o cuándo, pero espero tan pronto como sea posible luchar por el Mundial.

Además, es el primer español en conseguir la cabeza.

Sí, por desgracia tampoco hemos tenido pilotos españoles en equipos grandes hasta el día de hoy y soy quizá el primero que he tenido la oportunidad. Ser el primer español también me alegra.

Nos ha asustado al verle tan mal en el podio, casi desfallecido y teniendo que apoyarse...

Sí, me ha bajado mucho la tensión al ponerme muy rápido en pie al salir del coche. Es un problema del cambio de la presión. Ya me ha pasado en otros circuitos, pero aquí se acentuó aún más por la fatiga física que había acumulado. La verdad es que no veía muy bien quién estaba a mi alrededor.

¿Ha disfrutado más esta victoria que la primera que consiguió en Hungría hace dos años?

Esta la he podido disfrutar más. Después del año pasado que el coche no iba muy bien, la gente esperaba que lo hiciésemos mejor, se impacientaba, y esta victoria para mí es una alegría muy grande, para los aficionados y también para mis sponsors personales, que me vienen apoyando desde hace mucho tiempo.

¿Será este año el que le convierta en el más joven ganador del título mundial por delante de Emerson Fittipaldi?

Es muy pronto para decir eso. Hay que pensar en ir carrera a carrera. Aquí hemos tenido algunos problemas y podemos llegar a Europa y encontrarnos con que los Toyota, los Williams y, por supuesto, siempre los McLaren y los Ferrari pueden estar delante. Podemos ser octavos o novenos en algún gran premio. En cualquier caso, es el mejor arranque de mi vida y creo que si mantenemos la actual línea y evolucionamos el monoplaza carrera a carrera, tendremos algunas opciones de luchar por el título.

Háblenos entonces de su próxima carrera en Bahrain.

La verdad es que este año las cosas parecen distintas para nosotros. Renault va bien en todos los circuitos, y en la pista de Sakhir creo que volveremos a ser la referencia. Ahora somos el equipo a batir.

¿No le da miedo la locura que habrá a su regreso a España?

Ya está liada desde hace un año, así que...

Alonso, 16-Schumacher, 2. ¿Es un buen resultado, no?

Sí, eso es bueno. Ellos mejorarán cuando llegue el coche nuevo y sus neumáticos mejorados, y cuanto más puntos les cojamos ahora, mejor. No podemos olvidarnos de Michael y Ferrari, que serán los oponentes más fuertes para todos, cuando solucionen los problemas que ahora tienen.

¿A quién le dedica este triunfo, su segunda victoria absoluta?

A toda la gente que siempre me ha apoyado y ha estado conmigo, a los aficionados que se han levantado temprano y a mis sponsors personales, que llevan mucho tiempo conmigo. Esta victoria debería haber llegado antes, pero es una inyección de moral muy grande para mí.