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AUTOMOVILISMO

Éxito en el salto al pasado del 'Espíritu del Jarama'

Espectáculo en la jornada del sábado del evento que reúne múltiples actividades con la F-1 Histórica como gran estrella.

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Éxito en el salto al pasado del 'Espíritu del Jarama'

Gran espectáculo el vivido hoy en el Espíritu del Jarama, un evento que ha devuelto al trazado madrileño a los años en los que acogió grandes premios. Hoy se volvió a ver sobre la pista una feroz lucha por la victoria ¡en una carrera de Fórmula 1! Algo que no se veía desde 1981. Había ganas de ver los monoplazas en acción, y es que los aquí congregados eran los Fórmula 1 que ya corrieron entre 1966, cuando se celebró el primer Gran Premio, aunque no puntuó para el campeonato, para ello hubo que esperar un año más; y 1981, cuando se disputó el último GP de Fórmula 1 aquí y que terminó con victoria del canadiense Gilles Villeneuve, con Ferrari. Y es que el Espíritu del Jarama es un salto al pasado, un viaje a una época que muchos nombran como la mejor F1 de la historia, y no solo por cómo eran las carreras entonces, sino por la cercanía del público a los equipos, los coches y los pilotos.

La disparidad de las normativas a las que se vio sometido cada monoplaza ha conseguido que en el Espíritu del Jarama se juntaran sobre el asfalto vehículos muy diferentes en mecánica, estética y reglamentación, por lo que los aficionados pudieron realizar unas instantáneas imposibles de otra manera. La victoria en esta ocasión fue para Gregory Thornton, que corría con un Lotus 91/5 equipado con un motor Ford Corsworth V8 de unos 450 CV, aunque la potencia es desconocida, como casi todo en la Fórmula 1. La gran peculiaridad de este vehículo es que fue el último que utilizaba el llamado “efecto suelo”, una triquiñuela que utilizaban los monoplazas de finales de los 70 y principios de los 80 para conseguir una mayor velocidad en el paso por curva.

Además, los aficionados a la competición han podido ver el Campeonato de España de Resistencia con gran participación de pilotos españoles y portugueses; y de las futuras estrellas de la Fórmula 1 en la categoría de F4, uno de los primeros campeonatos de iniciación en monoplazas tras el paso por el karting.

Pero si el Espíritu del Jarama es un evento que te transporta varias décadas más atrás es porque en el paddock, un espacio en el que los aficionados se pueden mover libremente, encuentran todo tipo de actividades y exposiciones. Así, se puede contemplar los coches que amenizaron las tiras cómicas de Tintín, una muestra con los coches históricos de Seat, pues la marca española está celebrando el 50 aniversario del Seat 850 y el 20 de la gama Cupra, y donde además ha celebrado el concurso de elegancia entre los aficionados a los históricos de la marca donde el vencedor fue un Seat 1430/1800 llamado Ddauto, mientras que el Concurso “Best of Show” abierto a todas las marcas, el vencedor ha sido el Porsche 917K ex Le Mans y con el que Steve McQueen rodó la película de las 24 horas de Le Mans.

Además, los más pequeños pudieron disfrutar con los espectáculos de marionetas, magia, pintacaras… y con la carpa de circo en la que se recordaba a “Los payasos de la tele”. Mientras, los más mayores podían pertrecharse con cuanto les hiciera falta en su colección de coches en miniatura, libros o camisetas en el mercadillo de automovilia o aprendían a bailar Lindy-Hop con las clases de baile grupales con los conciertos en vivo de música swing.

El espectáculo continuará mañana con una nueva jornada repleta de emociones, recuerdos y formas que unos están recordando mientras otros están descubriendo.