Márquez: “Deseaba que quedara grabada esta salvada”

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Antes de subirse de nuevo a la Honda en Brno, Márquez posó para AS con la imagen de su salvada de 68.3 grados hace dos años en la pista checa. Por la tarde ha vuelto a hacerlo, esta vez con 67.5 y no ha tenido problemas en repetir la foto con la nueva imagen, al tiempo que decía que “ha sido para animar el viernes”.

-Ha vuelto a hacerlo. ¿Cómo ha sido posible repetir una salvada tan milagrosa y tan parecida a la de hace dos años?

-(Se ríe). La salvada de 2014 sigue siendo más grande y más espectacular, lo que pasa es que sólo hay fotos. En esta ocasión, te seré sincero porque, una vez la he salvado me he dicho a ver si la cámara estaba enfocando. (Risas). Así quedaba grabada… Cuando pasan estas cosas es porque vas empujando y buscando el límite. Se me ha ido de delante y ha habido un momento en el que pensaba que me caía, pero soy de esos pilotos que hasta el último momento no deja la moto y la he conseguido salvar con el codo. Ya empezaba a quemarme el codo, porque se ha empezado a agujerar el mono de apretar y luego, cuando estaba la moto más levantada, aún seguía yéndose de delante y estaba apretando con la rodilla para intentar salvarlo. Una vez salvado, al box para calmarme y ver cómo estaba el ambiente. He entrado al box un poco revolucionado, pero bien.

-¿Qué grado de inclinación ha revelado la telemetría esta vez?

-67.5 grados creo que me han dicho. En 2014 fueron 68.3 y con todo el cuerpo fuera. Aquí ha sido diferente, pero hay una imagen desde el interior que se ve ya la moto en el suelo, pero la he conseguido salvar. Cómo la he salvado no lo sé. Siempre digo que es suerte, pero ya van bastantes. Es reacción y supongo que el entrenar también tanto off road ayuda, porque en la tierra se mueve mucho la moto e improvisas mucho. Espero que en carrera no tenga que salvar ninguna de estas.

-Se habla de un Márquez más cerebral este año, pero ahí está la caída de Austria o esta salvada. ¿A qué nivel es más cerebral?

-Intento serlo el domingo, que es lo importante. En los entrenamientos tienes que ir al límite y buscar el cien por cien. La experiencia te puede salvar de algunas caídas con la pista fría o húmeda, pero yo estoy pilotando al límite e intentando sacar el máximo en cada entrenamiento. Ahora vienen circuitos en los que nos cuesta más en aceleración, con lo que hay que forzar más en las curvas, y eso significa riesgos. Eso lo hago en los entrenamientos y en la carrera, si tengo que hacer quinto como en Austria, pues quinto, pero sé que a base de quintos y de cuartos no se va a ganar el campeonato y hay que seguir arriesgando.

-¿Qué ha cambiado de la mañana a la tarde?

-Por la mañana, simplemente, no me he encontrado a gusto con la electrónica. No tenía una buena base y por la tarde hemos cambiado bastante a nivel de electrónica. De puesta a punto también hemos mejorado algo, aunque hay que seguir mejorando, porque la velocidad está ahí a una vuelta o dos o tres con neumático fresco, pero tenemos que mejorar con neumático usado. No estamos del todo lejos, pero se hace más el tiempo en las aceleraciones y ahí es donde estamos sufriendo más.

-Ha dicho que este primero no es su posición real. ¿Cuál es?

-De momento, por ritmo, estamos cuartos o quintos. Viñales también ha hecho un gran ritmo. Lo importante es que las dos Yamaha no están muy lejos, sólo dos o tres décimas por vuelta, pero en este circuito tan largo eso es menos que en Austria. Veremos mañana si me puedo acercar a una o dos décimas del ritmo. Con eso ya estaría satisfecho para el domingo, pero a ver si recorto más y tengo el mismo ritmo que las Yamaha, que son nuestros principales rivales.