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MOTOGP

Continúa la guerra Ducati-Honda por la prohibición de las alas

Cruce de reproches entre Dall’Igna y Nakamoto en Brno. “Es malo para el deporte que se utilice la seguridad como excusa para llevar a cabo esta prohibición”, afirma el italiano.

BRNOActualizado a
Continúa la guerra Ducati-Honda por la prohibición de las alas
Mirco Lazzari gpGetty Images

Calificación Moto GP Brno en directo

En Assen se anunció la prohibición de las alas en las MotoGP a partir de la próxima temporada y desde entonces ha habido mensajes desde Ducati, su principal defensora, a Honda, la principal opositora, acerca de lo absurdo de la medida a su modo de ver, sobre todo utilizando la seguridad como una excusa que no se creen en el box rojo. Hoy han coincidido los responsables técnicos de ambas fábricas en una rueda de prensa en Brno en la que también estaban sus otros colegas de MotoGP, quedando en evidencia la tensión que ha generado y aún genera esta historia de los apéndices prohibidos. El cruce de reproches entre Gigi Dall’Igna (Ducati) y Shuhei Nakamoto (Honda) ha sido más que evidente.

El italiano volvió a recalcar que “Ducati está en contra de esta prohibición. Nosotros fuimos los primeros en introducir este elemento, a principios de 2015 y desde entonces hemos tenido muchos accidentes, pero en ninguno de ellos ha habido evidencia alguna de que las alas puedan generar un problema relativo a la seguridad. Estamos muy molestos porque creemos que es malo para el deporte que se utilice la seguridad como excusa para llevar a cabo esta prohibición”.

El japonés expresó también los motivos de su postura: “Los alerones son un componente muy interesante pero muy costoso al mismo tiempo, como vemos en la Fórmula 1, donde hay equipos que pueden estar trabajando en la aerodinámica 24 horas al día durante los siete días de la semana. No sé si son o no peligrosos, pero los costes de su evolución son elevadísimos. Además, las alas de los monoplazas de Fórmula 1 nunca se llevarán a los coches de calle”.

Hubo réplica por parte de Dall’Igna: “Eso es verdad, pero es que las alas de las motos tampoco tienen nada que ver con los que se emplean en la Fórmula 1. Creo que la prohibición es negativa porque las posibilidades que ofrece este campo en el mundo de las motos es muy amplio, y no explorarlo puede repercutir a todos los niveles”. La teoría de Gigi es que, pese a la supresión, se incrementará el coste porque las fábricas seguirán buscando las mismas prestaciones que ofrecían las alas, pero ya sin ellas. Es decir, ayudar en estabilidad de las frenadas y mantener lo máximo posible la rueda delantera sobre el asfalto en las aceleraciones.