Las primeras 12 carreras del Mundial 2016 han dejado claro que ningún equipo puede discutir el liderazgo de Mercedes. Ni siquiera Ferrari, quien tras un notable 2015 donde cosechó tres victorias de la mano de Sebastian Vettel, se presentaban en 2016 con el único objetivo de ganar.
Si analizamos los diferentes registros que tanto en calificación como en carrera han marcado Sebastian Vettel y Kimi Raikkonen frente a Lewis Hamilton y Nico Rosberg, podemos observar como la Scuderia ha disminuido de 2015 a 2016 ligeramente la brecha con los de Brackley, mientras que ha aumentado considerablemente en carrera.
A partir de estos datos, es evidente que Ferrari ha recortado tiempo a Mercedes solamente en pistas de media-baja carga aerodinámica, una señal de que el SF16-H es todavía deficiente en este aspecto frente al W07.