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F1

Vacaciones en la F1: ¿Cómo se organizan los equipos?

El verano es siempre uno de los periodos más esperados por los empleados de las escuderías, ya que disfrutan de 14 días de descanso.

Actualizado a
Mecánicos de Renault empujan el coche de Jolyon Palmer durante el GP España 2016.
Tom GandolfiniAFP

El parón veraniego siempre es uno de los momentos más deseados por todos los integrantes de un equipo. El incremento del número de pruebas que a lo largo de una temporada se organizan en la Fórmula 1, obligó a la FIA en 2009 a incorporar en el reglamento deportivo, un artículo donde se estipulase un tiempo concreto donde las escuderías no pudieran trabajar.

La normativa en su punto 21.8. establece que "todos los competidores deben cumplir un periodo de cese de la actividad de catorce días consecutivos situados entre dos eventos consecutivos que estén separados por al menos 24 días durante los meses de julio y/o agosto. Si dos eventos consecutivos estuvieran separados por sólo 17 días en este periodo, el cese de actividad debe ser de trece días. En cualquier caso, los competidores deben notificar a la FIA su periodo de cese de la actividad dentro de los 30 días anteriores al inicio del campeonato".

El primer aspecto que han tenido que tener en cuenta los equipos este año acerca del descanso de verano, es que en realidad se lleva a cabo durante un espacio de tres semanas entre carrera y carrera. Por lo tanto, las escuderías han tenido que decidir si realizan el parón justo después del GP de Alemania o trabajar durante una semana más.

Cuestionado sobre este aspecto, Alan Permane, director de operaciones de Renault, ha afirmado que no existe una gran disparidad entre ambas opciones: "No es una gran diferencia, aunque el personal de la fábrica tiende a favorecer que sea inmediatamente después de la última carrera, mientras que la parte del equipo que viaja a cada circuito, prefiere trabajar una semana más para revisar el coche. Hay pros y contras como en todo. En el pasado hemos hecho las dos cosas, y hemos entendido que el mejor equilibrio es trabajar durante una semana más y luego tener las siguientes dos semanas de descanso".

Permane ha argumentado que trabajar durante una semana más y luego tener dos libres, permite inspeccionar los monoplazas con más detenimiento y solucionar los pequeños contratiempos que puedan surgir: "Nos permite desmontar nuestros coches de Alemania, asegurarse de que no hay dramas o desastres en ellos. Irse de vacaciones, volver y hacer la revisión final de cara a la siguiente carrera. Esta forma de ocupación es muy útil, ya que podemos volver de vacaciones, trabajar el lunes y martes y volar el miércoles para el circuito, así como los coches pueden salir el martes para llegar a la pista el miércoles. No hay ningún problema con el reposo porque se aplica a todos los equipos. Esa es la belleza del deporte: todo el mundo se detiene y todo el mundo empieza de nuevo al mismo tiempo".

Las vacaciones de verano son algo que no cuenta siempre con el apoyo de todos los empleados, a tenor de las palabras de Alan Permane: "A algunas personas les encanta y a otros realmente no les gusta porque están obligados a tomarse dos semanas de vacaciones. Simpatizo con aquellas personas que no tienen hijos y se ven obligados a tomar unas vacaciones. Pero no puedo imaginar tener 21 carreras sin descanso. Si tú te tomas un día de fiesta en cualquier otra época del año, estás constantemente recibiendo mensajes de correo electrónico y tu bandeja de entrada se llena. Con el cierre, no recibes ningún mensaje, porque las personas que normalmente se comunican con contigo, también están de vacaciones".

Por último, el director de operaciones de Renault señala que durante estos días, las escuderías aprovechan para limpiar y revisar instalaciones como el túnel del viento: "Lo que se permite hacer es una buena cantidad de servicio y mantenimiento, las cosas que se llevan a cabo en la fábrica operacionalmente hablando. Por ejemplo, no se puede utilizar el túnel de viento, pero no están excluidos de la prohibición cualquier actividad de asistencia y mantenimiento para que esté todo listo de cara al futuro. Pasa lo mismo con el CFD. Por ejemplo, durante las vacaciones de verano de este año, en Renault, estamos instalando un nuevo sistema que está perfectamente dentro de la normativa. El cierre significa que podemos hacerlo sin pérdida de tiempo".