Jorge Lorenzo: “Honda y Yamaha ya están a un nivel muy similar”

—Se le escucha con muy buen tono de voz.

—Estoy muy bien y muy contento. (se ríe).

—No tiene nada que ver este Lorenzo con el que me encontré el año pasado por estas fechas, cuando acabó el primer test de pretemporada descontento con la moto, los neumáticos y su condición física.

—Hombre, han cambiado las cosas y cuando estás más cerca de los más rápidos se nota en el ánimo.

—¿Ha cambiado más la moto o el piloto?

—Desde la carrera de Alemania del año pasado, quitando Valencia, donde no hubo unas condiciones normales, estuve en el podio diez carreras seguidas. Ésa es la línea que hay que seguir para intentar ganar el título. Es cierto que no ganamos tantas carreras como en 2013 (ocho contra trece en 2014), pero realmente teníamos un buen nivel. Ahora la moto ha mejorado y eso permite que vayamos más rápido y tengamos opciones de ganar más carreras.

—¿Cuánto ha mejorado la Yamaha para 2015?

—La moto es muy parecida a la que tuvimos en el test de Valencia y fue en ese test donde dimos un paso bastante grande hacia delante. En Japón todavía están trabajando para traer algo importante de cara al segundo test de Sepang, pero de momento la moto es muy similar a la de Cheste.

—¿Esa mejora importante es el cambio ‘seamless’ definitivo que le permita, como en las Honda, también bajar marchas sin accionar la maneta del embrague?

—Entre otras cosas, sí.

—¿Y qué es lo que dice que ha mejorado esta M1?

—La moto ha mejorado en casi todos los aspectos, salvo en la frenada, donde no hemos podido evolucionar. En el resto de la curva, la moto es hoy más completa.

—¿Cuánto de esa mejora hay en que los Bridgestone de ahora sean los de su agrado y no los sienta peligrosos?

—Los neumáticos son los mismos que en la carrera de Sepang de 2014 y tienen los perfiles más blandos, tal como empezó a ser a partir de la carrera de Le Mans en la mayoría de circuitos, pero no en todos. Para 2015, Bridgestone tiene previsto traer estos neumáticos en casi todos los grandes premios.

—Es una buena noticia para usted…

—En general, para todos, porque son unos neumáticos más predecibles y naturales, pero sobre todo para mí porque tengo un estilo de conducción de mucho paso por curva y abro muy pronto el gas. Cuando tienes agarre en el máximo ángulo de inclinación es mejor que no tenerlo para ese tipo de pilotaje mío.

—En la presentación del Movistar Yamaha ya hizo hincapié en los cinco kilos menos que pesaba respecto a la pretemporada del año anterior y en lo bien que se veía. ¿Estos entrenamientos de Sepang han reforzado esa sensación?

—El peso es un dato más, que va relacionado con la condición física. Si la condición física es mala, casi seguro que no tienes un buen peso. Normalmente son cosas que van ligadas y ahora mismo estoy incluso mejor que como terminé 2014 y muchísimo mejor que a principio del año pasado. Hemos tenido más tiempo para entrenar en estos meses sin carreras, centrándonos en la fuerza muscular, la resistencia y haciendo más hincapié en la dieta para bajar el peso.

—¿Nota una mejoría anímica también?

—La de 2014 fue una temporada diferente a las que había tenido antes en MotoGP. Tuve regularidad en las diez últimas carreras, pudiendo recortarle puntos a Pedrosa y Rossi porque tuvieron más problemas, pero fue mi peor temporada, exceptuando la de 2008, en la que tuve muchas caídas. Normalmente he podido luchar por el título y esta temporada espero poder volver a hacerlo. De momento hemos empezado con muy buen pie y eso es una buena señal.

—El año pasado quedó la sensación de que Márquez era imbatible. ¿Cree que puede ser más accesible en 2015?

—Márquez se encontró el año pasado con que era el más fuerte física y mentalmente, el que estaba mejor preparado, incluso a pesar de la lesión del invierno que le hizo ganar en Qatar con más dificultad. Cuando estuvo recuperado de eso era el mejor física y mentalmente, y la Honda empezó muy fuerte en comparación con la Yamaha, que comenzó siendo una moto difícil. Cuando yo mejoré mi condición física y la Yamaha también mejoró, le costó más ganar a pesar de que seguía siendo el más rápido. Recordemos que cometió varios errores y que no fue el piloto que más puntos consiguió en la segunda mitad de temporada.

—A pesar de que a una vuelta la Honda sigue siendo más explosiva que la Yamaha, como usted mismo dijo el viernes, los ritmos de carrera han sido más parecidos. ¿Siente que la Yamaha está ahora más cerca que nunca de la Honda?

—Son motos muy diferentes, muy diferentes por el pilotaje que requieren y por sus diferentes concepciones, como motor, electrónica y chasis. En este circuito de Sepang las he visto a un nivel bastante similar. Vamos a ver en otros circuitos qué pasa y cómo evolucionan las dos marcas, porque faltan aún dos meses para que arranque el Mundial y todavía se pueden evolucionar las motos en ese tiempo y a lo largo del año.

—Que vea la M1 al mismo nivel que la RC213V en Sepang es una gran noticia porque eso no suele ocurrir en este circuito…

—Bueno, es una gran noticia, pero hay otros 17 circuitos y hay que ver cómo evolucionamos en cada circuito. Lo bueno es que en el segundo test de Sepang tendremos ese cambio nuevo que nos permitirá reducir más rápido y que podría ir mejor. Si es así tendremos una moto más completa si cabe.

—¿Qué puede significar esa mejora en el cambio?

—No lo sabemos aún. Yamaha es optimista, pero hasta que no se pruebe en la pista no se sabrá si hay mejora o no. La moto a una vuelta ya es mejor que la de 2014, pero en cuanto tengamos que luchar con un piloto Honda, y sobre todo con Márquez, que es un gran frenador, de momento no estamos igual de fuertes que ellos en la frenada y eso significa sufrir más en el cuerpo a cuerpo. Hay que mejorar la frenada para tener más opciones de ganar una lucha.

—¿Empezaría el Mundial mañana si por usted fuera?

—Aún faltan casi dos meses y pueden pasar muchas cosas, pero tengo muchas ganas de empezar ya el campeonato. Claro que sí.

—Eso es porque vuelve a sentirse muy fuerte.

—Bueno…