Recital de Merhi en Moscú

En la vida de un piloto de monoplazas hay momentos, situaciones y decisiones que pueden catapultar tu carrera, paralizarla o incluso enterrarla. A veces todo esto simplemente está marcado por un golpe de suerte o que las cosas no estén exactamente en tus manos. Roberto Merhi demostró en categorías inferiores como la F-3, la Eurocup o la F-3 Euroseries que pocos rivales alcanzaban su nivel. Derrotó de forma asidua a muchos nombres que ahora pasean en el paddock de la F-1 en dirección a uno de los monoplazas del Gran Circo. Sin embargo, tras el título de la F-3 Euroseries en 2011 sus pasos se encaminaron hacia el DTM y en el Alemán de Turismos las cosas le salieron... a medias. Ni siquiera un sensacional segundo puesto en la cita final del pasado año le permitió seguir. Mercedes prefirió al ruso Petrov.

Merhi se quedó sin asiento, pero le llegó la oportunidad con un modesto y novato equipo ruso, Zeta Corse, para hacer test en las World Series y una primera oportunidad en la primera fecha del calendario 2014, en Monza. Teto sacó todo su potencial y quedó segundo. La opción de seguir fue apareciendo en el horizonte y el castellonense no ha perdido la oportunidad de seguir creciendo. Hoy en Moscú ha logrado su primera victoria en la 3.5 y de la forma que acostumbraba: pole, vuelta rápida y dominio absoluto de la carrera de principio a fin. Sin dar opción a nadie.

Ahora es quinto en la general e incluso se asoma a tener opción de título. Difícil, eso sí. Principalmente porque ese honor parece reservado para Carlos Sainz Jr. que ha sufrido en el fin de semana ruso pero casi no ha perdido ventaja. Llegó con 43 puntos sobre el francés Gasly y se va con 33. Sano y salvo. Un sexto puesto de inteligencia en la segunda manga, de los que dan campeonatos. Sin buscar imposibles.

Ambos volverán a los monoplazas en dos semanas, en Alemania. Después tres citas más para que el madrileño logre el título que le debe catapultar a la F-1 y el de Benicassim haga ver que tiene talento más que de sobra para seguir recibiendo oportunidades para seguir corriendo y ascendiendo.

De momento, Merhi se llevó la alegría del año como él mismo explica: “Mi felicidad es total en estos momentos. Ganar partiendo desde la pole es lo más bonito que hay. En Spa viví momentos muy duros, pero el resultado global de este fin de semana es un revulsivo tremendo de moral para todos en el equipo Zeta Corse. Poco a poco estamos afinando el coche y el equipo, y yo espero que en el tramo final del campeonato más resultados como este comiencen a llegar. A nivel personal esta victoria es algo más que una simple victoria, porque me estoy demostrando a mi mismo el gran crecimiento que he experimentado desde que vencí el título de la F-3 EuroSeries en 2011. Hoy soy un piloto más completo que nunca y eso espero que me ayude a tener una oportunidad en el futuro en la Fórmula 1, donde mis dos rivales más encarnizados de los tiempos de la Eurocup 2.0 y la F-3, Ricciardo y Bottas, están triunfando de manera incontestable”.