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Fórmual 1 | Pretemporada en Jerez

Los problemas ahora se ceban con Red Bull en los test de Jerez

Ricciardo sólo dio tres vueltas y hay dudas de si llegarán a tiempo de ser competitivos en Australia. El encaje de la unidad de potencia de Renault en el chasis es la causa.

Actualizado a
Horner, Ricciardo y Marko, conversando ayer en el circuito de Jerez.

El chiste era un poco duro. Injusto, incluso. Pero representativo de una corriente de opinión en la F-1, cansada de los triunfos continuos de Red Bull en las últimas temporadas. Los aficionados llegados desde Asturias, kilómetros y kilómetros para ver a su Alonso, reían. Uno hacía de periodista, otro imitaba a Sebastian Vettel. “¿Cuántas vueltas has dado estos días al circuito de Jerez?” Y el que ponía cara de alemán contestaba con el famoso gesto del dedo índice levantado de Vettel cada vez que gana. Otro llegó a poner orden. “No riáis, a ver si luego van a dar otra vez con la tecla...”.

Pues quizá sí y además lo cierto es que una no dio. Pero pocas sí. Problemas evidentes y más complicados de resolver de lo que parecía en un primer momento para Red Bull, la escudería que ha ganado los cuatro últimos títulos de pilotos y constructores. Y es que después de que el día anterior los responsables de Renault aseguraran que el fallo estaría resuelto para ayer, lo cierto es que Daniel Ricciardo terminó echando humo su primera vuelta en el coche azul.

Después volvió a salir a la pista y completó otras dos, ni siquiera llegó a hacer una cronometrada. Tres en total. Parecía que iba a regresar, pero Red Bull decidió parar los entrenamientos. Y es que, según indicó el propio equipo, tuvieron que “dejar de nuevo las actividades de la pista por la tarde ante problemas similares a los que el segundo día nos obligaron a parar”.

Red Bull pasó “el resto del día investigando las causas para que el RB10 esté listo para el tercer día”. ¿Estará listo hoy? Complicado según distintos ingenieros consultados en el paddock estos días. El problema es de la unidad de potencia de Renault, pero mayor aún en el Red Bull que en el resto porque este tipo de cuestiones de ensamblaje no son fáciles de solucionar, el espacio es el que es y corregir la colocación y el aislamiento de los elementos más sensibles, hacer que el sobrecalentamiento desaparezca, es complicado. Sin embargo, Ricciardo no está preocupado, dice: “Nos va a ayudar el descanso antes del test de Bahrain para arreglar nuestros problemas, incluso si el último día de Jerez no estuviéramos en pista no estoy preocupado. Tenemos los ensayos de Bahrain y después llega Melbourne”. Y quitó importancia también al hecho de que Horner y Newey hayan vuelto a Milton Keynes: “Además, Adrian ha vuelto a la mesa de dibujo, así que supongo que sólo han hecho lo que debían, no podrían hacer mucho más aquí, creo que estará feliz de trabajar en su oficina”. Pero dejó ciertas dudas sobre que lleguen bien a Australia: “El tiempo está de nuestro lado para arreglar las cosas, incluso si no llegáramos a Melbourne en las mejores condiciones la temporada es larga. Estoy en un equipo que ha demostrado que sabe ganar y estoy seguro de que más temprano que tarde vamos a conseguirlo juntos”. En estos tres días, Red Bull ha dado un total de 14 vueltas y además tienen el peor tiempo de los coches que han logrado vueltas cronometradas en estos test.

Esta vez parece que Newey no ha acertado con sus diseños y se tiene que poner otra vez a dibujar y Horner ya habla de que ésta no es una F-1 como debe ser sino una competición entre constructores de motores. Ayer llegó Dieter Mateschitz a Jerez. Sonreía mucho. Malo...