La FIA considera legal la maniobra de Vettel

Jornada intensa y de vaivenes la de ayer en todo lo relacionado con la polémica de las banderas amarillas del GP de Brasil. No era para menos, en juego está la legitimidad del tercer título mundial de Sebastian Vettel, en entredicho por un supuesto adelantamiento irregular al francés Vergne.

El día comenzó con la confirmación oficial, vía 'Twitter', de la escudería Ferrari de una solicitud por escrito a la Federación Internacional de Automovilismo (FIA) sobre la legalidad de esta maniobra. No se trataba de una reclamación en toda regla, tan sólo de una consulta con la que, claramente, en Maranello querían curarse en salud antes de lanzarse a una cruzada de incierto desenlace para sus intereses y los de Fernando Alonso, el hombre que podría heredar esa corona.

Casi de forma paralela, la web de 'Autosport' aseguraba que una fuente de la FIA les había confirmado que consideraban que no había motivo alguno para la polémica, que el adelantamiento de Vettel al Toro Rosso era absolutamente legal. Los argumentos, siempre según este medio británico, eran que después de la señal luminosa amarilla pero antes de la siguiente verde previa a la curva cuatro, un comisario del circuito de Interlagos ondeaba una bandera verde, previa al inicio del sector que ya se consideraba libre. Según la FIA, en este supuesto prevalece esa bandera al tratarse de la primera señal visible al respecto. Es decir, que basándose en ese criterio el adelantamiento de Vettel fue correcto y la federación pretendía zanjar la polémica señalando que "no hay caso".

Las imágenes del vídeo de ese comisario con la bandera verde de pista libre se extendieron como la pólvora por las redes sociales, aunque hubo quien llegó a dudar de su veracidad, ya que la calidad de las mismas invitaban a pensar en un supuesto montaje o una broma de mal gusto.

Sin embargo, a media tarde el director de carrera de los grandes premios, Charlie Whiting, se encargó de despejar cualquier duda con declaraciones en la Prensa alemana: "Vettel lo hizo todo de manera correcta. Él reaccionó a una bandera verde que estaba 350 metros delante del último semáforo amarillo. Nunca tuvimos dudas de que ese adelantamiento fue legal".

Se desconoce si Ferrari ha recibido ya una respuesta oficial de la FIA a su aclaración, no a través de los medios, y cuál será su decisión antes del plazo de reclamación que se agota hoy. Con estos precedentes la lógica invita a pensar que, en efecto, el caso está cerrado, pero habrá que esperar hasta para ver cómo acaba el culebrón. Porque esto va de sorpresa en sorpresa...