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Motociclismo | Actualidad

Dakota, el hijo de Mamola, ya sube al podio

Con 14 años fue tercero en la segunda carrera catalán de velocidad en el equipo de Alzamora.

Actualizado a
Dakota junto a otros compañeros

Pelo rojo, sonrisa de pillo adornada por unos brackets en los dientes como señal de sus catorce años, un talento recién explotado para montar en moto y un padre de leyenda. Se llama Dakota, es hijo de Randy Mamola y ha subido al podio en su segunda carrera del Catalán de velocidad en la categoría Pre125 GP.

Dakota tiene la velocidad en la sangre, que dirían los clásicos, y siempre ha querido montar en moto, algo lógico teniendo en casa como modelo a un piloto que logró trece victorias en la categoría reina y está considerado el Gilles Villeneuve de las motos, el mejor piloto que nunca logró un título del mundo. Pero además está dentro de la estructura de Monlau Competición que comanda Emilio Alzamora, campeón del mundo de 125cc en 1999.

El ilerdense se muestra ilusionado con su nuevo pupilo: "Tiene maneras y disfruta encima de la moto, que es lo importante en estas edades, intenta lograr que su afición se convierta en algo más serio, pero de momento lo que tiene que hacer es disfrutar". Dakota llega de las categorías inferiores de promoción de 50 y 70cc, en concreto de la Copa Metrakit, y este año va a disputar, además del Catalán de velocidad donde ha sido quinto y tercero en dos carreras disputadas, el Campeonato Mediterráneo de Velocidad.

Es el propio Alzamora quien explica cómo se toma Randy Mamola que su hijo quiera dedicarse a esto de competir en una máquina de dos ruedas: "La verdad es que muy bien, está muy ilusionado. Randy es muy buena persona y no ha podido evitar que su hijo quiera ser piloto de motos, así que está decidido a apoyarle".

Además de Randy, en el equipo de Monlau, patrocinado por Scalextric y Bradol, está Alex Rins, de trece años, que acabó segundo la última carrera del campeonato catalán, y el suizo Jesko Raffin. La prueba la ganó Álex Márquez, hermano de Marc, a quien los pilotos de Monlau tienen como objetivo emular. Un piloto que ya ha logrado llegar al Mundial, el sueño para estos adolescentes que provocan el entusiasmo vital de Alzamora.