Se acabó el sueño de ver a dos españoles al volante de un McLaren. Lewis Hamilton debutará el próximo año en Fórmula 1 junto a Fernando Alonso. Es más, si todo va bien, serán la pareja de la escudería durante tres años. Ron Dennis se ha atrevido y ha decidido finalmente cumplir la promesa que le hizo a su pupilo, de 21 años, hace cinco meses: Si Kimi no seguía en el equipo, él sería el elegido para sustituirle.
Entre medias un aguerrido catalán, De la Rosa, sustituyó a Montoya al volante de las flechas de la plata y empezaron las dudas sobre el riesgo de quemar a la perla de la cantera. La experiencia de Pedro y el factor de buen ambiente que insufló en la escudería llevaron a las otras dos cabezas pensantes del equipo, Whitmarsh y Haug, a apoyar la candidatura del barcelonés al puesto de segundo piloto. El genial podio de Hungría puso la primera piedra en el edificio de un equipo completamente español. Y Alonso, que sabía que a su lado iba a tener un escudero y probador excelente, también promocionó la candidatura 'Rosa'. Él representaba la continuidad frente al golpe mediático y de márketing de vivir el debut del brillante aunque novato primer piloto de color de la historia.
Pero Ron Dennis no estaba del todo convencido. Tampoco Bernie Ecclestone, el patrón de la F-1, que ha intervenido con una presión desmedida: "Si fuera por mí, Lewis ya estaría compitiendo". El copropietario de la escudería comenzó a expresar sus dudas en los entrenamientos de Monza. Pedro se calificó séptimo con un motor renqueante, a ocho décimas de la pole de Raikkonen. El catalán, brillante en ritmo de carrera, sólo tuvo su hándicap en la lucha a una vuelta. Dennis confesó en Italia a su entorno que veía a Pedro como un development driver (piloto de desarrollo) y no tanto como un hombre de carreras. Por eso decidió medirlos a ambos en los test previos a China y Japón. En Silverstone, el patio de su casa, Hamilton realizó ensayos de repostajes y salidas. Todo un indicativo de que podía correr en el periplo nipón.
Pero Lewis falló y realizó un tiempo cuatro décimas superior al que debía haber hecho sin casi gasolina. Pedro es mucho Pedro y se ganó allí el puesto para las tres últimas carreras. Las últimas pruebas en Jerez sólo demostraron que estaban madurando a la estrella británica para 2007. Toda esta presión afectó al español, que erró con los neumáticos de Japón y se coló en la primera curva durante la calificación de Brasil. Ahí están también esas dos carreras que De la Rosa tuvo que hacer sin revoluciones para homologar un motor. Demasiados condicionantes para que el barcelonés pudiera lucirse. ¿Fue intencionado?
Dennis le dijo a su pupilo que quería contar con él el 30 de septiembre, antes del final de la temporada. A De la Rosa, mientras, le explicaron que vivirían un duelo en pretemporada. Una vez confirmados los sponsors españoles todo se quedó en el catalán como probador y reserva a la espera de un fallo del británico. Lewis es un afortunado y el trato que Dennis tiene con él estomaga a aquéllos que han tenido que debutar en Minardi por no ser ingleses: "Hamilton no tiene que obsesionarse con batir a Alonso. Sólo debe centrarse en mejorar su propio rendimiento".
